domingo, 14 de febrero de 2010

SHAKESPEARE. TEMA 5



SHAKESPEARE: UN TEATRO MÁS QUE POÉTICO


Un gran momento para un gran creador

La obra de Shakespeare no existe sólo gracias a su genio personal, sino también gracias a una coyuntura privilegiada en la situación de la historia literaria de su país, que ofrecía, sobre todo para el teatro, una posibilidad única: la idea de reunir – por última vez- la voz de la tradición popular con la voz de la minoría de cultura renacentista, en una atmósfera en que todavía la evolución religiosa no había llegado a excesivas fracturas ni enfrentamientos y, todo ello- last but not least- en una perspectiva de esperanzas económicas y políticas. El famoso economista Keynes reconoció –con el humor y el espíritu deportivo propios de su país – que si Inglaterra pudo permitirse el lujo de un Shakespeare, fue porque iniciaba su despegue económico, gracias en buena medida, al oro y la plata capturados a España por Drake y llevados a Isabel I a bordo de su Golden Hind. Pero dentro del poco más de medio siglo que va desde el arranque del teatro elisabetiano, hasta el cierre de los teatros en 1640 – por el puritanismo y la guerra civil- , esta feliz síntesis, bajo influjo regio, de mayoría y minoría, de tradición medieval y novedad aristocrática, se da mejor en la primera mitad de ese periodo - justamente durante la actividad de Shakespeare, y aun eso dejando fuera sus últimos cinco años de retiro: 1611-1616. Quedan ya al margen de ese feliz acuerdo los grupitos de bur

gueses que, en el concejo londinense, procuran mantener el teatro arraya y en las afueras. Pues ya desde 1615 o 1620 el teatro empieza a ser más bien patrimonio de la nobleza, cada vez menos de la corona, y en creciente distanciamiento respecto a la plebe: es el teatro de luz artificial.

El favor popular en el siglo XVIII hizo que se fuera elevando a Shakespeare no sólo para Inglaterra, a gran ídolo del Romanticismo, e incluso en el Gran Bardo nacional.


La obra de Shakespeariana no es materia para la lectura , sin más, sino para la escena, aunque sea en el teatrrillo de nuestra imaginación.

VIDA DE UN PROFESIONAL
William Shakespeare, firmaba Shakspear , pero la posteridad decidió añadir la "e" superflua para reforzar el sentido de "sacude-lanza" que ya había servido a Robert Greene para denunciar su trabajo anónimo como shake-scene ,"sacude-escena". Nació en abril de 1564 en Stratford-on-Avon, condado de Warvick. Su padre John, guantero de profesión y comerciante, tuvo algún cargo municipal, pero luego sufrió reveses de fortuna y pérdida de su cargo: en 1596 su hijo William, ya famoso y adinerado, consiguió ennoblecerle, para ennoblecerse él, con un escudo de armas donde campea la lanza, spear, de su apellido, y el arrogante lema, en el francés heráldico de los ingleses, "Non sanz droiet" ("No sin derecho"). De pequeño, William asistió a la escuela local, la Grammar School, donde grammar significaba "gramática latina", quizá leería algo de Ovidio y de las tragedias de Séneca, que estaban en el arranque del teatro inglés. En 1582, esto es, a sus 18 años, se casa con Ann Hathaway, ocho años mayor que él, y que demasiado poco después le da su primera hija; en 1585 nacen los mellizos Judith y Hamnet (éste muere en 1568 James Joyce, ha sugerido, no sin humor, que el poema Venus y Adonis sería un reflejo de la seducción del muchacho por la mujer ya mayorcita, sobre todo, para lo que eran veintiséis años en una mujer de entonces; también ha dicho que la muerte de Hamnet encontraría eco, invirtiendo los término, en su Hamlet (aunque ya existía el tema teatral con el mismo nombre). En 1587, Shakespeare se va a Londres sin su familia. No se sabe cómo empezó su relación con el teatro - de guardián del aparcamiento de los caballos se ha sugerido, pero pronto es actor, y luego autor, y llegará a coempresario. En 1590, estrena, quizá en colaboración con Marlowe, la primera parte de las tres de Enrique VI . En 1591 estrena Ricardo III, Tito Andrónico y otras obras. Ese mismo año , cerrados los teatros por la peste o tifus (la plague siempre endémica en Londres) , da a conocer el poema Venus y Adonis al que ya hemos aludido.

En 1594 es coempresario y autor de la compañía de Los Sirvientes del Lord Chambelán, y publica el poema Violación de Lucrecia. Se relaciona con el ambiente del conde Essex, que sería luego acusado de conspiración, y, en especial , con el noble Henry Wriothesley, verosímil dedicatario de los sonetos que seguramente empezaba a escribir entonces. En 1596 obtiene el escudo de armas y muere su hijo. Al año siguiente compra una casa en Stratford. En 1598 imprime con su nombre una comedia, Trabajo de amor perdido. En 1599 su compañía abandona el teatro del Curtain, así llamado no por "el telón" , curtain, inexistente entonces, sino por el nombre del terreno periférico donde estaba instalado, y se establece en el teatro del Globe, construido para tal uso. Shakespeare tiene la décima parte de la propiedad. En 1600 estrena Hamlet y en 1601 fracasa un intento de golpe de estado del mencionado conde de Essex, quien quiso preparar los ánimos haciendo representar Ricardo II en el Globe. Muere ese año el padre de Shakespeare. En 1603 muere la reina Isabel I, y le sucede Jacobo I; cierre temporal del Globe, por la epidemia, y gira de su compañía por provincias. En 1605 , año del estreno de Lear y Macbeth, se abre el teatro de Blackfriars, a cubierto y con luz artificial, para un público selecto. En 1606 se casa su hija Susanna; en 1608 muere su madre y nace su primera nieta; al año siguiente publica sus Sonetos, dedicados a W.H. (¿Henry Wriothesley?). En 1610 se retira a vivir en Stratford. En 1611 pone en escena La Tempestad como obra de despedida al público, y abandona sus actividades, sin cuidarse de preparar alguna edición completa de sus obras. En 1616 se casa su hija Judith; en abril hace testamento, en el que lega a su mujer Ann su "segunda mejor cama", entre otras cosas, y muere el día 23, es decir , en la misma fecha que Cervantes, pero no en el mismo día, por no estar vigente todavía en Inglaterra el nuevo calendario gregoriano. Como se ve, su hábil sentido económico le permitió enriquecerse con tan sólo 36 ó 37 obras teatrales, y jubilarse tranquilamente antes de los cincuenta años. Esto es todo pero quizá quisiéramos saber algo más de la dark lady, la "dama morena" que tanto le hizo sufrir, pero a la que Shakespeare se dirige también alguna vez con irónico despego.

"OTHELLO": LOS CELOS COMO FATALIDAD.


Sin atribución cronológica segura, entre las "obras medias" y la época de las "grandes tragedias" queda Othello, el moro de Venecia. En este caso será mejor empezar por ver un resumen de su desarrollo, forzosamente largo, porque la simplicidad lineal del tema- el que mata a su mujer por celos infundados- ha dado lugar a que Shakespeare se entregara a un auténtico virtuosismo estructural, con gradaciones de enredo en la marcha de la tragedia.

Aun siendo tan largo el resumen de la acción, todavía hay que advertir que , antes de su inicio, hay unas escenas superfluas para el asunto mismo, pero psicológicamente convenientes, porque en ellas se sabe cómo el moro Othello, llegó a casarse con la noble veneciana Desdémona, sin cuya explicación la presencia en escena de este insólito matrimonio habría tenido un tono misterioso, si no monstruoso, que habría oscurecido el conflicto esencial, para el cual no era tan importante la condición racial de Othello. El color de Othello es simplemente una adición para facilitar sus celos con un "complejo", como se diría hoy, si es que no tenía un verdadero simbolismo moral, el de la negrura. Pero, además, en esas escenas preliminares se pone la mejor nota humana del drama: situar la causa del amor de Desdémona en la compasión instintiva de mujer hacia el hombre que ha pasado peligros:


"Ella me quiso por los peligros que yo había pasado:
y yo la quise porque los compadeció"

Pero luego, entrando en tragedia misma, el verdadero protagonista es Iago, el malvado lleno de odio, Shakespeare añadió luego nuevos motivos para su odio a Othello. Rara vez perfila con tanta meticulosidad e insistencia un "tipo" psicológico- en lo que la palabra tipo puede comportar de estudio genérico y casi técnico: en este caso, la hipocresía al servicio del odio-. Hay , por ejemplo, un auténtico virtuosismo de la reticencia en sum modo de despertar las sospechas de Othello hacia Cassio.

Iago, ciertamente, es ayudado en sus planes por el azar - por ejemplo, con el pañuelo perdido por Desdémona, y la exageración de ésta al pedir a Othello que restablezca en su puesto a Cassio;pero esto casi no lo echamos de ver ante la entrega de Iago, por la pasión de su odio, a unos planes tan complejos que difícilmente podían salirle bien. Casi diriamos que es "un artista del mal": artista también en sentido de ir más allá de su provecho y su prudencia en obsequio a su proyectado "crimen perfecto" Ahí es donde está la clave del interés, no moral , sino formal, estético, del propio Shakespeare por su personaje Iago, en quien traslada a un talento de organización criminal su propio talento de organizador de desarrollos teatrales.





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